Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna maldición.
Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.
Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños y promesas
por época
por tacto y por sabor.
Sin temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos. ~
Mario Benedetti.
A Hitler le encantan los perros
Hace 1 semana



1 comentario:
Me encanto lo que escribiste, sos buena redactando.
Muy lindo blog, lo mas posible es que lo visite seguido :)
Nos olemos luego!
Publicar un comentario